¿Eres de los que prefieren cocinas y electrodomésticos más tradicionales?
O ¿disfrutas más con una cocina moderna y actual?
En este artículo te voy a hablar de las ventajas e inconvenientes de poseer una cocina eficientemente energética y de los materiales más óptimos para que puedas ahorrar dinero y de paso colaborar por mantener el medio ambiente en mejores condiciones.
¿ Sabías que las cocinas de inducción tienen una eficiencia energética de entre un 80 y un 95% ? ¿ y que la eficiencia de las cocinas de resistencia eléctrica y de gas se sitúa en un 65 y 45% respectivamente ?
Este tipo de cocinas no es solamente más eficiente y ecológica para nuestro medio ambiente sino que según el menaje que utilicemos será más saludable para los seres humanos.
Por ejemplo, materiales como el cadmio o el plomo son metales pesados que aunque tengan efectos similiares en los resultados de cocción pueden llegar a producir intoxicaciones químicas.
Según un estudio realizado en Ecuador la corrosión de estos materiales puede incluso asociarse a la enfermedad de Alzheimer, ya que, pueden introducirse en el sistema digestivo, circulatorio y en el cerebro a través de los alimentos.
En este mismo ensayo, se estudian ollas de diferentes materiales y el resultado obtenido es que como materiales más óptimos para cocinar encontramos que las ollas de hierro enlozado obtiene mejores resultados con respecto a la olla de acero inoxidable y ésta en cuanto a la olla de cuerpo de aluminio.
Por otro lado y en otro estudio llevado a cabo, se encontró que materiales como el acero tienen mayor eficiencia energética por su baja conductividad eléctrica, es decir, que deja pasar más fácilmente la corriente eléctrica a través de este material.
Pero también será importante que se utilicen materiales con una capa de material conductor como el aluminio o cobre, ya que, permiten una transmisión rápida y uniforme del calor por todo el menaje.
Otro elemento importante es utilizar utensilios de cocina hechos de materiales con alta capacidad calorífica específica que aunque necesitarán más tiempo para calentarse, también tendrán una importante cantidad de energía almacenada cuando estén calientes y la temperatura del material disminuirá más lentamente cuando se transfiera su energía.
A continuación te hablaré de las desventajas (que son menores que las ventajas):
- Tienen una tecnología más sofisticada que las cocinas de resistencia eléctrica y de gas.
- Hay que tener cuidado al utilizarla, para no rayar la vitrocerámica.
- Las cocinas de varias zonas de inducción presentan un precio elevado, no siendo así en las cocinas de un solo inductor.
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